La muerte de un gato de bodega del vecindario llamado Kit Kat ha sacudido al Distrito de la Misión de San Francisco. según el New York Times.
Después de que Kit Kat fuera atropellado por un robotaxi Waymo en la noche del 27 de octubre, los lugareños crearon un santuario para conmemorarlo. El área también ha sido decorada con carteles rivales, algunos criticando a Waymo, otros señalando las numerosas muertes causadas por conductores humanos.
Jackie Fielder, quien representa al Distrito de la Misión en la Junta de Supervisores de SF, crió a Kit Kat al mismo tiempo que defiende una propuesta de resolución municipal que pide al estado que permita a los votantes locales decidir si los automóviles sin conductor pueden operar en sus vecindarios.
«Un conductor humano puede ser considerado responsable, puede saltar, pedir perdón, puede ser localizado por la policía si se trata de un atropello y fuga», dijo Fielder al Times. “Aquí no hay nadie a quien responsabilizar”.
Waymo, cuyo codirector ejecutivo recientemente habló en Disrupt sobre la importancia de la seguridaddescribió el incidente como uno en el que un gato “se lanzó debajo de nuestro vehículo mientras se alejaba”. La compañía dijo que envía «nuestras más sinceras condolencias al dueño del gato y a la comunidad que lo conoció y lo amó».
La comunidad del Distrito de la Misión en San Francisco ha sido conmocionada por la muerte de un gato de bodega llamado Kit Kat, quien fue atropellado por un robotaxi Waymo en la noche del 27 de octubre. El incidente ha generado una gran cantidad de emoción y debate en la comunidad, con algunos residentes creando un santuario para conmemorar a Kit Kat y otros expresando su frustración y crítica hacia Waymo.
La zona donde ocurrió el accidente ha sido decorada con carteles, algunos de los cuales critican a Waymo y otros que señalan las numerosas muertes causadas por conductores humanos. La muerte de Kit Kat ha resaltado la preocupación por la seguridad de los vehículos autónomos y la necesidad de responsabilidad en caso de accidentes.
Jackie Fielder, quien representa al Distrito de la Misión en la Junta de Supervisores de San Francisco, ha sido una de las voces más prominentes en el debate. Fielder, quien también crió a Kit Kat, ha defendido una propuesta de resolución municipal que busca permitir a los votantes locales decidir si los automóviles sin conductor pueden operar en sus vecindarios.
Fielder argumenta que los conductores humanos pueden ser considerados responsables en caso de un accidente, ya que pueden ser localizados y sancionados por la policía. Sin embargo, en el caso de los vehículos autónomos, no hay nadie a quien responsabilizar. «Un conductor humano puede ser considerado responsable, puede saltar, pedir perdón, puede ser localizado por la policía si se trata de un atropello y fuga», dijo Fielder al New York Times. «Aquí no hay nadie a quien responsabilizar».
Waymo, la empresa que opera el robotaxi que atropelló a Kit Kat, ha emitido un comunicado expresando sus condolencias al dueño del gato y a la comunidad que lo conoció y lo amó. La empresa describió el incidente como uno en el que un gato «se lanzó debajo de nuestro vehículo mientras se alejaba». Waymo también ha destacado la importancia de la seguridad en sus operaciones, y su codirector ejecutivo recientemente habló en la conferencia Disrupt sobre la necesidad de priorizar la seguridad en el desarrollo de vehículos autónomos.
A pesar de las condolencias de Waymo, la comunidad del Distrito de la Misión sigue estando conmocionada por la muerte de Kit Kat. El incidente ha resaltado la necesidad de una mayor regulación y supervisión de los vehículos autónomos, así como la importancia de la responsabilidad y la transparencia en caso de accidentes.
La propuesta de resolución municipal defendida por Fielder busca abordar algunas de estas preocupaciones, permitiendo a los votantes locales decidir si los automóviles sin conductor pueden operar en sus vecindarios. La propuesta también busca establecer normas y regulaciones más estrictas para los vehículos autónomos, con el objetivo de garantizar la seguridad de los peatones, ciclistas y animales en la zona.
En resumen, la muerte de Kit Kat ha generado un debate importante en la comunidad del Distrito de la Misión sobre la seguridad de los vehículos autónomos y la necesidad de responsabilidad en caso de accidentes. La propuesta de resolución municipal defendida por Fielder busca abordar algunas de estas preocupaciones, y es probable que el incidente tenga un impacto significativo en la regulación y supervisión de los vehículos autónomos en San Francisco en el futuro.
La comunidad del Distrito de la Misión ha demostrado una gran cantidad de apoyo y solidaridad con el dueño de Kit Kat, y ha expresado su frustración y crítica hacia Waymo. El incidente ha resaltado la importancia de la seguridad y la responsabilidad en la operación de vehículos autónomos, y es probable que tenga un impacto significativo en la forma en que se regulan y supervisan estos vehículos en el futuro.
En cuanto a Waymo, la empresa ha emitido un comunicado expresando sus condolencias y destacando la importancia de la seguridad en sus operaciones. Sin embargo, la empresa también ha sido criticada por su respuesta al incidente, y es probable que enfrente un mayor escrutinio y regulación en el futuro.
En conclusión, la muerte de Kit Kat ha generado un debate importante en la comunidad del Distrito de la Misión sobre la seguridad de los vehículos autónomos y la necesidad de responsabilidad en caso de accidentes. La propuesta de resolución municipal defendida por Fielder busca abordar algunas de estas preocupaciones, y es probable que el incidente tenga un impacto significativo en la regulación y supervisión de los vehículos autónomos en San Francisco en el futuro. La comunidad del Distrito de la Misión ha demostrado una gran cantidad de apoyo y solidaridad con el dueño de Kit Kat, y ha expresado su frustración y crítica hacia Waymo. Es probable que el incidente tenga un impacto significativo en la forma en que se regulan y supervisan los vehículos autónomos en el futuro.