El último presupuesto estatal de Nueva York incluye nuevos requisitos de divulgación para las empresas que utilizan datos personales para fijar precios diferentes para diferentes compradores; por ejemplo, cobrarle más si tiene un historial de derroche.
Las empresas que utilizan precios personalizados ahora deben informar a los clientes: «Este precio fue fijado por un algoritmo utilizando sus datos personales». según el New York Times.
No está claro qué tan extendida está esta práctica entre los minoristas en línea. Un portavoz de Uber le dijo al NYT que la compañía ahora está mostrando esta divulgación a los neoyorquinos, aunque describieron la ley como “mal redactada y ambigua” e insistieron en que Uber sólo utiliza la geografía y la demanda de los clientes para calcular sus precios dinámicos.
La Federación Nacional de Minoristas presentó una demanda para detener la ley, pero un juez federal permitió que siguiera adelante.
Lina Khan, ex presidenta de la Comisión Federal de Comercio y ahora copresidenta de el equipo de transición a la alcaldía de Zohran Mamdanidijo al NYT que la ley será una herramienta «absolutamente vital» para el gobierno, pero también sugirió que hay «mucho más trabajo por hacer» para regular la práctica.
El estado de Nueva York ha implementado un nuevo presupuesto que incluye requisitos de divulgación para las empresas que utilizan datos personales para fijar precios diferentes a sus clientes. Esta práctica, conocida como «precios personalizados», implica que las empresas utilizan algoritmos para ofrecer precios distintos a diferentes compradores en función de sus datos personales, como su historial de compras o sus hábitos de gasto.
Según el New York Times, las empresas que utilizan precios personalizados deben informar a los clientes que el precio que se les ofrece fue fijado por un algoritmo que utilizó sus datos personales. La notificación debe ser clara y concisa, y debe indicar que el precio fue determinado por un algoritmo que utilizó sus datos personales.
Aunque no está claro cuán extendida está esta práctica entre los minoristas en línea, algunas empresas ya han comenzado a cumplir con la nueva ley. Un portavoz de Uber le dijo al New York Times que la compañía está mostrando la notificación de divulgación a los neoyorquinos, aunque describe la ley como «mal redactada y ambigua». Uber insiste en que solo utiliza la geografía y la demanda de los clientes para calcular sus precios dinámicos, y no utiliza datos personales para fijar precios.
Sin embargo, no todas las empresas están de acuerdo con la nueva ley. La Federación Nacional de Minoristas presentó una demanda para detener la ley, argumentando que es injusta y puede perjudicar a las empresas. Sin embargo, un juez federal permitió que la ley siguiera adelante, lo que significa que las empresas deben cumplir con los nuevos requisitos de divulgación.
Lina Khan, ex presidenta de la Comisión Federal de Comercio y ahora copresidenta del equipo de transición a la alcaldía de Zohran Mamdan, dijo al New York Times que la ley es una herramienta «absolutamente vital» para el gobierno, ya que permitirá a los consumidores tener más control sobre sus datos personales y cómo se utilizan. Sin embargo, también sugirió que hay «mucho más trabajo por hacer» para regular la práctica de los precios personalizados, lo que sugiere que la ley es solo el primer paso hacia una mayor transparencia y regulación en la industria.
En resumen, la nueva ley de Nueva York requiere que las empresas que utilizan datos personales para fijar precios diferentes a sus clientes informen a los clientes sobre esta práctica. Aunque algunas empresas ya han comenzado a cumplir con la ley, otras han expresado su oposición y han presentado demandas para detenerla. La ley es vista como un paso hacia una mayor transparencia y regulación en la industria, pero también se reconoce que hay más trabajo por hacer para proteger a los consumidores y regular la práctica de los precios personalizados.
Es importante destacar que la práctica de los precios personalizados puede tener implicaciones significativas para los consumidores, ya que puede llevar a que se les cobren precios más altos o más bajos en función de sus datos personales. La ley de Nueva York es un paso hacia la transparencia y la accountability en la industria, y puede servir como un modelo para otras jurisdicciones que buscan regular la práctica de los precios personalizados.
En cuanto a la implementación de la ley, es probable que las empresas tengan que hacer cambios significativos en sus prácticas y sistemas para cumplir con los nuevos requisitos de divulgación. Esto puede incluir la implementación de nuevas tecnologías y procesos para recopilar y analizar datos personales, así como la creación de nuevos departamentos y funciones para manejar la divulgación y la transparencia.
En general, la ley de Nueva York es un paso importante hacia la protección de los consumidores y la regulación de la práctica de los precios personalizados. Aunque hay desafíos y controversias relacionadas con la implementación de la ley, es probable que tenga un impacto significativo en la industria y en la forma en que las empresas utilizan los datos personales para fijar precios.